¿Tu prótesis se mueve, huele mal o te causa molestias? Descubre las claves para el correcto mantenimiento de prótesis dentales.
Si llevas prótesis dental, hay algo que debes tener claro: no es un accesorio más. No es como un par de gafas que puedes limpiar de vez en cuando o un anillo que te pones y te quitas sin pensar demasiado. Una prótesis dental es parte de ti. Y si no la cuidas bien, no solo se verá mal, sino que empezará a darte problemas, por lo que hay que llevar acabo un mantenimiento de prótesis dentales a diario.
Si no se lleva a cabo un mantenimiento, tarde o temprano aparecerán molestias, mal aliento, dificultades para masticar… Y lo peor es que muchas veces, cuando te das cuenta, ya es demasiado tarde.
Así que vamos a hablar claro: mantener una prótesis limpia y bien cuidada no es opcional, es una necesidad. Y si quieres evitar problemas (y visitas innecesarias al dentista), lo mejor es que sigas leyendo y apliques todo lo que te vamos a contar en este artículo.
¿Por qué es tan importante el mantenimiento de prótesis dentales?
Cuando te colocaron la prótesis, lo más seguro es que te dieran algunas instrucciones básicas tipo: “Límpiala todos los días”, “No la metas en agua caliente”, “Ven a revisión cada cierto tiempo”.
Sin embargo, lo que nadie suele explicar es por qué es tan importante seguir estas indicaciones al pie de la letra.
Y, es que, seamos sinceros: muchas personas se relajan demasiado con el mantenimiento de su prótesis. Al principio, todo es nuevo y se preocupan por limpiarla bien. Pero con el tiempo, da más pereza y la rutina se vuelve más laxa. Ahí es cuando empiezan los problemas.
Porque una prótesis no es un diente natural, pero tampoco está libre de riesgos. Si la descuidas, se convierte en un nido de bacterias. Y si las bacterias se acumulan, pueden provocar infecciones en las encías, llagas, inflamación y, en casos más graves, hasta pérdida ósea.
Así que, si crees que con limpiar tu prótesis “de vez en cuando” es suficiente, vuelve a leer el párrafo anterior.
¿Cómo limpiar una prótesis dental correctamente?
Olvídate de enjuagarla con agua y pensar que está limpia. Las prótesis necesitan un mantenimiento diario para evitar la acumulación de bacterias y restos de comida.
Limpieza diaria: el paso imprescindible
- Retírala con cuidado antes de limpiarla. Si es removible, hazlo sobre una toalla o el lavabo lleno de agua para evitar que se rompa si se cae.
- Cepíllala bien con un cepillo especial para prótesis o un cepillo de dientes de cerdas suaves. Nada de cepillos duros, ya que pueden rayar la superficie.
- Usa un limpiador adecuado. No uses pasta de dientes normal, porque puede ser abrasiva. En su lugar, usa jabón neutro o limpiadores específicos para prótesis dentales.
- Enjuágala con abundante agua para eliminar cualquier resto de producto.
- Limpia también tu boca. No sirve de nada tener la prótesis impecable si no cuidas tus encías y lengua. Usa un cepillo suave y un enjuague recomendado por tu dentista.
Limpieza profunda: al menos una vez a la semana
Además del cepillado diario, es recomendable sumergir la prótesis en una solución desinfectante al menos una vez a la semana.
Estos productos eliminan bacterias y manchas sin dañar la prótesis. Pero ojo: no uses agua caliente, ya que podría deformarla.
Si usas una prótesis removible con ganchos metálicos, consulta con tu dentista antes de usar ciertos productos, ya que algunos pueden corroer el metal.
Errores que pueden dañar tu prótesis sin que te des cuenta
Muchos de los problemas que llevan a que una prótesis se deteriore rápido no tienen que ver con el paso del tiempo, sino con malos hábitos en su mantenimiento.
Uno de los errores más habituales es dormir con la prótesis puesta. Aunque algunas personas se acostumbran a llevarla de forma permanente, lo ideal es dejar que las encías descansen durante la noche.
Otro problema es usar productos agresivos para limpiarla, como lejía o pastas de dientes abrasivas. Esto solo conseguirá dañar el material y hacer que la superficie se deteriore antes de tiempo.
Y luego está la costumbre de comer alimentos demasiado duros sin cuidado. Si muerdes algo muy resistente con la prótesis, puedes terminar desgastándola o incluso fracturándola.
Por último, algo que muchos hacen sin darse cuenta: dejar la prótesis en un vaso de agua toda la noche sin añadir nada más. Si no usas una solución adecuada, la humedad constante puede favorecer la acumulación de bacterias en la superficie.
¿Cómo asegurarte de que tu prótesis siempre se ajuste bien?
No importa lo bien que esté hecha tu prótesis. Con el tiempo, la boca cambia, y eso puede hacer que el ajuste deje de ser perfecto.
Si notas que la prótesis se mueve al hablar o al masticar, no intentes ajustarla por tu cuenta. Forzarla o intentar modificarla puede dañarla aún más. Lo mejor es acudir al dentista para que valore si necesita un ajuste profesional.
Además, si sientes que la prótesis te está provocando irritaciones o rozaduras en las encías, no lo ignores. Es una señal clara de que necesitas una adaptación o que está empezando a desgastarse.
¿Cuándo acudir al dentista para revisar tu prótesis?
Lo ideal es hacer revisiones periódicas, al menos una vez al año, para comprobar que todo está en orden. Pero, si notas algo extraño antes de ese tiempo, no esperes.
Especialmente, deberías acudir al dentista si:
- Sientes molestias al masticar o hablar.
- Notas que la prótesis se mueve más de lo habitual.
- Tienes irritaciones o llagas en la boca.
- Aparecen manchas en la prótesis o tiene un mal olor constante.
- Has notado algún cambio en la estructura de la prótesis.
Cualquiera de estos síntomas puede indicar que la prótesis necesita un ajuste o una limpieza profesional. Y cuanto antes lo soluciones, menos problemas tendrás después.
¿Notas algún problema con tu prótesis dental? No esperes más, contacta con nosotros hoy mismo para una revisión. ¡Haz clic aquí y solicita tu cita!
El mantenimiento de prótesis dentales es clave para que duren más
Una prótesis dental bien cuidada puede durar muchos años sin problemas. Pero eso no ocurre por sí solo. Depende de ti y de los cuidados que le des cada día.
Siguiendo una buena rutina de limpieza, evitando hábitos que la puedan dañar y acudiendo a revisiones periódicas con el dentista, te aseguras de que tu prótesis se mantenga cómoda, funcional y en perfecto estado durante mucho más tiempo.
Y, por supuesto, no esperes a que aparezcan molestias. Si crees que algo no está bien del todo, ven a Clínica Dental La Paz para que le echemos un vistazo.